En apenas unos simples pasos podes crear estos frascos decorativos llenos de colores y formas!
Para comenzar necesitas azucar, tizas de colores y un lindo frasco del tamaño que quieras.
Empieza vertiendo un poco de azucar en una hoja grande de papel o cartulina, apoyada sobre una superficie para luego tomar una tiza del color deseado y rasparla sobre el azucar hasta que se haya desarmado por completo o hasta obtener el color deseado. De esta forma conseguiremos los distintos colores.
Al terminar cada color, tomar cuidadosamente el papel donde trabajamos y verter todo nuestro polvo colorido dentro del frasco. Dependiendo de la cantidad y la disposición de los distintos colores se irán formando las hermosas composiciones coloridas que podemos apreciar con el trabajo finalizado.
Para terminar se puede decorar la tapa con hilo sisal , flores, parafina o simplemente dejar el frasco abierto (aunque corres el riesgo de que se caiga el contenido)